Un día salí de mi casa y perderme en la ciudad, buscando inspiración en las pequeñas cosas que suelo ignorar al darle peso al bullicio de la urbe.
Llevé un pequeño aparato supuestamente obsoleto en cuanto a estándares de resolución de imagen hoy en día. Era una máquina lenta, con fallas, pero destacaba en una particular añoranza que le tenía, me hacía recordar paisajes conocidos, detalles efímeros, épocas mejores.
Colección de imágenes tomadas con una digicam en paseos deambulatorios por la ciudad.